Nacido en Barcelona en 1969, es licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona. La gastronomía es la inseparable cara B de su actividad periodística, porque lo que más le gusta —además de comer y a ser posible con sus dos hijos— es contar historias. Publicó Homo Gastronomicus, el blog del que Ferran Adrià, en una de sus absurdas genialidades, aseguró que era el mejor de España, y también ha colaborado con Gastronosfera, Tinta de Calamar, Apicus y Bon Viveur. En la actualidad, su principal labor es atizar a propios y extraños dentro del mundo gastronómico en la newsletter «Reflexiones de un gastrónomo angustiado», que compagina con su labor como jefe de sección de sociedad en el periódico La Vanguardia.